Licenciada en Nutrición Allyson Monzón

¿Por que no estás logrando resultados con tu alimentación?

¿Por qué no estás logrando resultados con tu alimentación?

Una de las preguntas que me he hecho desde que soy nutricionista es porque las personas no logran sus resultados esperados con su alimentación. Creo que es una cuestión de enfoque. Actualmente todavía se cree que, contando calorías, restringiendo alimentos y sufriendo en el proceso se van a lograr los resultados esperados a largo plazo.

En mi experiencia he llegado a la conclusión de que, cuando se trata de alimentación, no alcanza con hacer indicaciones sobre nutrientes.

Los modelos clásicos de nutrición que sólo se basan en que alimentos elegir, indicando restricciones constantemente no son sostenibles a largo plazo. Refuerzan la frustración y la culpa, y esas emociones quedan asociadas a la alimentación. Estos modelos olvidan que nuestro vínculo con la alimentación está atravesado por múltiples factores personales, sociales, culturales, entre otros. Ver sólo una fracción del asunto, no nos permite integrar todos los aspectos que intervienen y mucho menos acercarnos a un resultado favorable.

Puede que no estés logrando tus objetivos porque no estás considerando otros aspectos muy importantes para el vínculo con la alimentación.

 

Los problemas de alimentación no se resuelven sólo con alimentos.

Habitualmente llegan a mi consulta personas que han pasado de dieta en dieta, no es raro que alguien me diga “hice todas las dietas que te puedas imaginar”. También me encuentro con personas con una gran confusión respecto a como alimentarse, tanta información abruma y no saben qué hacer. Otras personas, que creen saber QUE es lo que tienen que hacer, “la teoría me la se” me dijeron hace poco, aún así no saben el COMO. Aunque también debo decir que esa “teoría” muchas veces está llena de mitos y creencias sociales de “cómo debería” ser nuestra alimentación.

Es un tema complejo como verás, que no se resuelve ni con la dieta de turno ni con información en exceso.

Reenfocar la alimentación

Pasar de una alimentación basada en calorías y nutrientes a una alimentación con un enfoque integral creo que es fundamental si queremos realmente lograr nuestros objetivos. Es nuestro derecho poder vivir la alimentación desde una mirada integral, el acto de nutrirnos es un proceso hermoso, importante y necesario para l@s human@s.

Creo que uno de mis mayores desafíos como nutricionista es poder integrar todos los aspectos que hacen a nuestra alimentación. Acompañar a armar ese “puzzle” donde tenemos piezas que hacen referencia a alimentos, pero solo son algunas, también encontramos los significados de los alimentos, las creencias, la historia personal, la identidad, el rol social de la comida, y una cantidad de factores más.

Es un desafío que me motiva muchísimo, ya que esta manera de ver la alimentación permite respetar la individualidad de cada persona, para así lograr un vínculo sano y satisfactorio con este aspecto tan importante para la vida.

Debo confesar que cuando inicié la carrera creía que ese “puzzle” se armaba sólo con piezas que hicieran referencia a alimentos (como me lo habían enseñado). Pero no tardé mucho en darme cuenta que había algo más (aunque en aquel momento no tuviera idea de que era). Hoy sé que ese “algo más” es lo que realmente determina nuestros resultados con la alimentación, es lo que guía nuestras decisiones, y lo que permite establecer un vínculo en paz y duradero con la comida.

El acto de alimentarnos tiene fuertes componentes sociales, culturales y familiares. Por su parte también inciden nuestros pensamientos sobre los alimentos, ese mundo interno único de cada persona que es determinante.

La individualidad hace que en cada persona existan diversos aspectos que tienen mayor relevancia que otros, cada historia personal tiene sus propios factores determinantes, cada persona tiene su escala de valores, creencias, experiencias. Esa diversidad de aspectos tienen un rol en su vínculo con la alimentación donde cada persona es la protagonista de su propia historia y su presente.

El problema del objetivo de adelgazar

Al iniciar un proceso de acompañamiento pregunto cuál es el objetivo y muchas veces me encuentro con la respuesta “quiero adelgazar”. Cuando indago un poco más empiezan a aparecer otros objetivos como “sentirme bien”, “tener más agilidad”, “lograr mayor concentración”.

Este es un tema delicado, ya que está socialmente muy aceptada la idea de querer adelgazar.

Muchas veces se plantea el adelgazamiento como sinónimo de cuidar la salud. Pero se ha comprobado que el peso corporal no define la salud de una persona. No podemos afirmar que alguien delgado es sano, ni tampoco que alguien con un cuerpo grande tenga falta de salud. Inciden diversos factores en la salud, y no sólo aspectos físicos.

Otra de las principales razones que se asocian al querer adelgazar es la presión social. Las industrias del adelgazamiento, alimentaria y farmacéutica, así como los medios de comunicación y las creencias sociales refuerzan el estereotipo de la delgadez asociada al valor personal, el éxito y a la felicidad, entre otras. En este caso propongo cuestionar si esas razones externas realmente están alineadas con vos. En lo más profundo de tu ser, ¿realmente querés adaptarte a esta presión de otras personas? ¿Realmente querés responder a necesidades ajenas dejando de lado tus propias necesidades? Nuestro valor personal no está en juego en función del peso corporal. Las personas que nos quieren en su vida, no nos elijen por el talle de pantalón que usamos.

Una amiga me decía que se pasó años buscando su “peso ideal” y cuando lo logró se seguía sintiendo igual de frustrada en su interior. Se dió cuenta que necesitaba trabajar otros aspectos para sentirse realmente bien.

Estereotipos sociales

Perseguir el objetivo de adelgazar refuerza el estereotipo de belleza (irreal por supuesto) e invalida nuestros valores humanos, que están por encima del peso. El principal problema del objetivo de adelgazar es que promueve la frustración, la culpa y la desconexión con nuestro valor como personas, así como la desconexión con la sabiduría de nuestro cuerpo. Las dietas de adelgazamiento promueven un ciclo antinatural dónde el objetivo principal no sólo en general no se logra, sino que como consecuencia existe una mayor ganancia de peso a largo plazo. Y lo más grave, se establece una disminución de la autoestima, mayor frustración, ansiedad y culpa. Factores que tienen una gran incidencia en el bienestar integral.

Es necesario repensar nuestro vínculo con la alimentación, cuestionar las creencias sociales y volver a conectar con nuestras fortalezas. Establecer un objetivo que esté alineado con tus propias necesidades y de esa forma podemos acercarnos a un bienestar mayor.

Este es un tema muy sensible del que es necesario hablar con mayor detenimiento, ya que hay muchísimas personas atrapadas en la búsqueda de resultados sin lograr sus objetivos, sintiendo una gran frustración, desconectándose de su alimentación y con una gran incidencia en su calidad de vida.

Como continuación de este artículo, en el siguiente te voy a contar 3 factores que determinan los resultados con la alimentación.

Nutricionista Allyson Monzon

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Contáctame por Chat
Enviar via WhatsApp